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Inversión en IT. ¿Qué decisiones tomar al inicio?

Publicado el 17/02/21

En una organización en marcha muchas de las decisiones acerca de infraestructura y tecnologías de la información van a girar acerca de mantener o reemplazar lo existente, y las inversiones van a estar orientadas a nuevos proyectos o cambios por obsolescencia o fallas. Pero al iniciar un emprendimiento todo está por decidir, y en materia de IT muchas de esas decisiones iniciales van a condicionar los proyectos futuros de la empresa naciente. 

Vamos a tratar brevemente algunas de esas decisiones, para después ir profundizando en las que requieran mayor análisis en próximas publicaciones:

1- Equipos: seguramente este punto es el más pensado y en el que tenemos más información, sobre todo si la actividad a la que nos dedicamos la requiere para brindar el servicio ofrecido. La decisión acá la define el presupuesto a destinarle y el gusto personal de cada uno: ¿de escritorio o portátil? ¿PC compatible o Mac?. Es importante prever el crecimiento, para que no quede chico u obsoleto antes del final de la vida útil.

2- Conectividad: por un lado debemos seleccionar el mejor proveedor de internet para nuestras necesidades y presupuesto en la zona o las zonas de alcance de la empresa y por otro la forma de conectar nuestros equipos a internet. Si los datos están en la nube y sin ellos no podemos trabajar, no podemos depender de la estabilidad y la falta de interferencias de una red wi-fi, por prolija que quede la oficina. Tampoco podemos confiar en que la distribución de la red wifi dependa del módem provisto por el proveedor de internet, sino que se debe pensar en una inversión en equipos de comunicaciones para garantizar la estabilidad y la seguridad de la red de dispositivos de la empresa. Será necesario evaluar la necesidad de routers, switches y firewalls y definir cuáles pueden ser reemplazados por software y cuáles deberán formar parte de la infraestructura de la organización. 

3- Almacenamiento: en parte está relacionado con el punto anterior, pero hay cuestiones específicas que tienen que ver con la estrategia de almacenamiento y accesibilidad a los datos de la empresa, sobre todo si parte del trabajo se hace en equipo y se deben compartir archivos o información. Las preguntas a responder respecto de esta cuestión van a ser las siguientes: ¿en cada equipo lo suyo, centralizado en un equipo en la sede de la empresa o en la nube, contratando espacio de almacenamiento (por ejemplo, Google Drive)? ¿Centralizado o distribuido? En caso de optar por almacenamiento en la nube, lo que permitirá el acceso desde cualquier ubicación, se vuelve central una correcta elección respecto del punto siguiente. 

4- Presencia en la web: la empresa debe existir en la WWW además de existir en la vida real o justamente por su existencia en la vida real, debe tener presencia en la web. Se deben emprender acciones para conseguir esa presencia: registro del dominio de la empresa en la web a través del servicio provisto por Nic.ar; contratación de hosting para alojar la página web, diseño de la página web, registro en Google My Business para vincular la presencia virtual con la física; proveedor de correo electrónico y otros servicios relacionados (el servicio corporativo de Google provee de una solución de correo + almacenamiento en la nube). Se deben evaluar también las redes sociales más adecuadas para la instalación de la empresa en el mundo digital, dependiendo del público objetivo y la actividad que desarrolla.  

5- Aplicaciones: acá debemos contestar qué programas o sistemas necesito utilizar para el desarrollo de mi actividad y para el registro de transacciones y tareas, para poder realizar después evaluaciones de desempeño, crecimiento y rentabilidad basadas en datos. En el mercado hay infinidad de opciones para cada uno de estos y es conveniente tomarse un tiempo para evaluarlas, en función de todas las decisiones mencionadas en los puntos anteriores, para que sea absolutamente compatible con ellas. 

6- Plan de contingencia: definir un plan de acción para cuando las cosas fallen y políticas de seguridad para que no fallen. Antivirus, firewalls y demás dispositivos orientados a la seguridad. Copias de seguridad de datos y programas, un equipo de repuesto para no dejar de trabajar cuando el principal no enciende, una conexión de internet alternativa, para poder acceder a datos y aplicaciones en la web, redes privadas virtuales para trabajo remoto o desde distintas locaciones. En este punto se debe mantener más que en los anteriores un equilibrio entre el costo del plan de seguridad y contingencia y el costo de no tenerlo. 

Por supuesto, estas decisiones deberán tomarse teniendo como Norte el propósito de la empresa, la industria en la que se desenvuelve y la modalidad de trabajo elegida para todos y cada uno de sus miembros y sin perder la visión estratégica de la misma. Siempre es más fácil crecer en forma consistente y orgánica cuando se pensó ese crecimiento desde el inicio, sobre todo en temas como tecnologías que implican una inversión importante tanto financiera como en curva de aprendizaje hasta llegar a explotar su máximo potencial. 

Si están iniciando un proyecto de inversión o recambio tecnológico o quieren saber por dónde empezar podemos seguir charlando en estudio@abrach.com.ar o comentando en las redes.